Nerds wanna party
Hace pocos días y lejos de la cité de la lumière el espíritu burlesque resurgió en una de las calles matritenses y con una fiesta inaugurativa de piso y curso 2010/2011. ¿Quizá un poco tarde? Yo creo que fue en el momento exacto.
La anfitriona se apresuró a dedicar cada pequeño rincón de su nueva casa y ha llenarlo con todo tipo de postres y cóckteles: desde el mítico Manhattan, pasando por kiwi o innovando con ron blanco y mucho azúcar.
Todos los invitados estábamos disfrazados y, aún no se sabe por qué, pero la mayoría, sin excepción, decidieron ir del estilo Molino Rojo. Excepto yo y mis amigos que preferimos maquearnos e imaginar cómo actuarían unos frikis por primera vez a un burdel. El resultado: unos verdaderos pringaos con complementos molones.
En resumen la fiesta y el ambiente fue realmente espectacular.
P.D: Irene gracias
P.D.2: Queremos una segunda parte